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España, Estados Unidos, fútbol, Fútbol Femenino, Francia, Futfem, Mundial, selección femenina de fútbol
¿Podemos ganar a Estados Unidos? Durante siete días nos lo hemos preguntado, aunque en realidad son más. Nos lo empezamos a preguntar cuando salió el sorteo, cuando todo apuntaba a que ese sería el cruce de octavos. ¿Podemos ganar a Estados Unidos? Nos cambia la cara, es David contra Goliat. Pero nos olvidamos de que hasta hace muy poquito, apenas siete meses, Goliat casi ni sabía que existía David. EEUU es un gigante al que nunca pudimos ganar… porque nunca nos habían dado la oportunidad de hacerlo. Nunca nos habían dejado ser David. Hasta que llegó un ensayo una noche de enero en el Rico Pérez. Hasta que ha llegado el momento en un Mundial.
EEUU no va a hacer su mejor partido contra España. Saben que son mejores, las mejores del mundo, han jugado siete Mundiales, en los siete han ganado el partido de octavos, en los siete han vuelto a casa con una medalla (tres oros, una plata y tres bronces). Van a jugar sabiendo que van a ganar, porque es lo que hacen siempre. Porque son Goliat. Pero David venció a Goliat. En el momento justo, en el lugar adecuado, David sacó la mejor versión de sí mismo. Y creyó que podía con el gigante.
Contra EEUU jugarán catorce David. 11 + 3 futbolistas a las que, en algún momento de su carrera, miramos y dijimos: “Qué buena es”. De algunas lo seguimos diciendo, de otras no tanto, pero de todas hemos pensado, en alguna ocasión, que en España no había nadie como ella(s). Esas son las 11+3 que tienen que jugar contra Estados Unidos. Esas versiones que nos dejaron con la boca abierta.
Aquellas niñas que soñaron con ser futbolistas y hoy viven la explosión del fútbol femenino. Aquellas niñas que están cumpliendo el sueño de todas las veteranas que les enseñaron lo que era el fútbol, cuando la recompensa solo era fútbol. Aquellas niñas que puede que hoy disputen su último partido en un Mundial y aquellas que están disputando su primer gran Campeonato ¿Hay algo más grande que ganar a Estados Unidos? Nunca nadie había jugado en España un partido así. Ojalá, al acabar, 14 jugadoras salgan diciendo: “Hoy he hecho el mejor partido de mi vida”