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España ha ganado a Estados Unidos. Sí, no es el equipo cuatro veces campeón del Mundo y olímpico. Pero me da igual. Es uno de esos días que pensábamos que tardaría siglos en llegar. ESTADOS UNIDOS. La mejor selección de fútbol femenino de la historia. Y 2-0. Sin sufrir. Y solo hemos necesitado cuatro partidos para ganarlas. Y a pesar de todo, de saber que es la bomba, de que hace unos meses este “título” sí se lo hubiésemos convalidado a Jorge Vilda… no estoy contenta. Estoy rara. Sí, hemos ganado a Estados Unidos. Y ahora, ¿qué hacemos?
La España menos España de Vilda, la que se empeñó en no convocar, en no dar la oportunidad, ha vencido a Estados Unidos. Las jugadoras en las que le costó confiar para jugar contra Islas Feroe ahora empatan a Suecia y ganan a USA. Llegué a pensar que nunca volvería a ver a la buena de Maitexu con la selección, que Zornoza era un “caso Sosa” dos, que en España la única lateral que existía era Leila y hasta que Maitane acabaría jugando un Mundial con Colombia. Nosotros nunca pensamos que fueran de segunda categoría, al contrario, siempre se ha defendido que era incomprensible que no tuvieran la oportunidad.
¿Que no olvidemos sus nombres? Nosotros nunca lo hemos hecho. Yo, por ejemplo, no olvidaré que Misa se ha ganado a pulso la oportunidad de ser la portera titular de la selección, sin tener ninguna duda de que tener competencia nos haría volver a ver a la mejor Paños. No olvidaré que durante siete años Ivana ha sido la eterna suplente, ni que Laia Codina ha marcado después de no estar convocada en una selección en la que ya faltaban 18, siguiendo los pasos de una Athenea que ¡¿qué más tiene que demostrar?! Por no olvidar, tampoco olvidaré dos noticias, una buena y otra mala: la buena es que Mariona no se ha lesionado, la mala es que lo han hecho Irene Guerrero y Olga.
Me alegro de que todas ellas hayan tenido la oportunidad de enfrentarse a Estados Unidos, como ya hicieron otras. Me alegro de que toda su vida pueda contar que ganaron a Estados Unidos. Pero sigo sin estar contenta. Hace no mucho tiempo de aquel “USA tiene el mejor equipo del mundo y el segundo mejor equipo del mundo”. Hoy podemos confirmar que España tiene un potencial A y B espectacular, para luchar contra las mejores del mundo, para no achicarse, para no sentirse menos que nadie. Y hasta para ganar. Y sin embargo, no hago más que pensar en que faltan 15+3. Que hay 15 jugadoras que tenían su sitio en este once. Que hoy iban a estar en el campo (no tengo pruebas ni tampoco dudas), y que seguro habrían querido estar en El Sadar, ante la mayor multitud que se ha juntado para ver a la selección femenina, compitiendo contra Estados Unidos.
Y estoy rara, porque ¿qué hacemos ahora? Hemos empatado con Suecia y ganado a Estados Unidos. ¿Nos olvidamos de las 15+3 como ya sucedió en 1996, guardando la carta en un cajón de la memoria? ¿Nos despedimos sin despedida, como ya pasó con Vero, Nata, Pris, Soni, Vicky…? ¿Convertimos esto en una guerra Madrid – Barça o nos empeñamos en defender que no es eso… al igual que se empeñan en decir que no pidieron la destitución de Vilda? ¿Esperamos que el Michael Robinson del futuro nos cuente en su Informe qué ocurrió realmente en 2022? ¿Celebramos o no celebramos los goles?
Si alguien tiene respuestas, las agradezco. Yo no tengo claro nada. Y ahora, ¿qué hacemos?